No me dejes en esa oscuridad que me tiembla la voz al notar que se acerca la soledad, huerfana de abrazos, caidos al suelo como mis propias lagrimas, que supera la ficcion la imaginación de un ser humano, no me juzgues por dejar a mi tierra, he venido a la tuya, solo espero la bienvenida, nada pido, nada es mío solo una tumba grabada con el nombre de mi Madre
13 comentarios:
Deliciosa prosa... Saludos!
Muy bellos versos, tristes si, pero bellas.
saludos fraternos
un abrazo
Hermoso, muy hermoso tu sentir.
un abrazo
mj
Un dolor y un ruego, mezcla de niño y hombre, me conmoviò mucho. Es muy bello. Un abrazo querido "piano". Mercedes Sáenz
Tu tierra es la de todos, nuestra tierra es la de todos, la única que existe, la fronteras existen sólo en nuestra imaginación, en la de algunos.
Estás en casa, puedes pedir lo que quieras.
Yo te doy mi abrazo.
La soledad del corazón se comparte en compañía pero, es verdad, que la soledad es la compañera inseparable de la vida humana.
Si en algo puedo aliviar tu soledad, te digo aquí están mis dos manos amigas y mi corazón de abuela para lo que necesites.
Quería decirte que he llegado hasta vuestro blog compartido a través de mj. Saludos.
ES MUY BELLO. NOS LEEMOS
Pero... debes buscar la luz.
La amistad es pródiga en ella.
No estás sola, no lo estás.
Un abrazo que seque tus lágrimas.
Alicia
Querida Raquel, cuántos abrazos habremos de darte para curar tu alma herida? cuántas flores sembrar y árboles regar para decirte que en los ríos aún hay vida. Allí se descansa, se pace, se alivia todo y se le deja correr hasta el mar; que él se encargue, amiga mía.
Mi abrazo fuerte, enorme, cálido.
Poesís triste, muy triste pero cargada de tanta belleza en el fondo.
Muy bella...
Excelente, en carne viva. Me encantó.
No debe haber instante más desesperado, me viene esta palabra, para el que piensa en su propia tierra estando en otro sitio, donde incomprensiblemente suele reprocharse la extranjería como una falta grave, cuando somos todos criaturas en busca de un sitio y de ese amor que nos haga bien, nada más sencillo y no se entiende el por qué de la intolerancia, maldito mal de todos los tiempos.
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